43. Los Hispanos en Rechazo Deben Ser Infames
14 de enero 2014 -- Vamos a decir que el nombre que sus padres le dieron es claramente un fracaso en Hollywood, o que usted quiere ser una estrella de rock y decide que necesita un nombre artístico.
Para tener éxito en los Estados Unidos en el siglo 21, ™también necesita anglificar su nombre y ocultar su herencia? Muy pocas personas saben que un cantante pop medio-Puertorriqueño llamado Peter Hernández está en camino hacia la cima del entretenimiento estadounidense - el espectáculo del intermedio del Super Bowl el 2 de febrero - pero eso es porque va como Bruno Mars, el nombre artístico que escogió para "evitar ser estereotipado" como cantante de la música latina. La historia del entretenimiento y el deporte estadounidense está llena de gente famosa que deliberadamente ocultaban sus orígenes étnicos allá en el tiempo cuando esa era la única manera en que podían conseguir trabajo. Sus transformaciones, para vencer la discriminación, eran totalmente comprensible. Pero ocultar su herencia hoy en día - en un momento en que tantos apellidos latinos han conquistado Hollywood, los deportes y la industria del entretenimiento - no sólo es innecesario, sino una vergüenza. Eso sí, hay una larga lista de famosos estadounidenses que son en su mayoría desconocidos como los latinos - personas que sentían que tenían que anglificar sus nombres para tener éxito. Pero eso fue hace mucho tiempo. Teníamos una mujer llamada Margarita Cansino, hija de un bailarín de flamenco de Sevilla, España, que comenzó su carrera con el pelo oscuro, las guitarras y las castañuelas, y luego se convirtió en la pelirroja Rita Hayworth, la gran actriz de cine de los años 1940 y 50. Y Ricardo Valenzuela cantó "La Bamba'' en español, pero se hacía llamar "Ritchie Valens ". Jo Raquel Tejada (Welch es su apellido de casada) dice que está orgullosa de su herencia boliviana, pero poca gente sabe que ella es una latina. Y la cantante Vikki Carr, una mexicana-americana, que primero fue conocida como Florencia Bisenta de Casillas Martínez Cardona. Baldemar Huerta, el hijo nacido en Texas de un inmigrante ilegal de México, se convirtió en un famoso cantante de música country después que adopto el nombre de la marca de su guitarra y se hizo llamar Freddy Fender. Incluso tuvimos una actriz de cine mudo, Anita Evelyn Pomares, que se convirtió en una estrella como "Anita Page." Y hay esas otras celebridades latinas que se han beneficiado de tener apellidos no hispanos, así como los actores estadounidenses de origen mexicano Anthony Quinn y Salma Hayek, y la cantante Linda Ronstadt, o incluso el actor medio -peruano Benjamin Bratt. Pero ™™sabía usted Sammy Davis Jr. tuvo una madre puertorriqueña? ™O que la cantante Joan Baez tuvo un padre mexicano? O que Vanna White de "Wheel of Fortune" y Linda Carter (La Mujer Maravilla) son parte Latinas? ™Sabía usted que la superestrella del béisbol Reggie Jackson tuvo un padre puertorriqueño y que el miembro del Salón de la Fama Ted Williams tuvo una madre mexicana? ™Sabía usted que Williams reconoció intencionalmente ocultar su origen étnico del mundo? "Si yo tuviera el nombre de mi madre, no hay duda de que hubiera tenido problemas en esos tiempos, (considerando) los prejuicios que la gente tenía en el sur de California", Williams escribió en su autobiografía de 1970, "Mi Turno Al Bate: La Historia de Mi Vida". Es cierto. En el pasado, los latinos tuvieron que adoptar nombres artísticos anglosajones, o por lo menos dejar de usar sus apellidos hispanos, con el fin de infiltrarse en el cine, los deportes y la industria de la música. Y tal vez eso era excusable cuando la discriminación en el negocio del espectáculo y los deportes era tan flagrante que no tenían otra opción. Pero también es cierto que muchos jóvenes latinos se vieron privados de ver a sus propios modelos a seguir en el cine, la industria de la música y hasta en los deportes. Para muchos jóvenes latinos que crecen amando el béisbol, por ejemplo, saber que Ted Williams era un latino hubiera sido una gran fuente de orgullo. Los aficionados latinos de todo el país se hubieran sentido atraídos a apoyar a los Medias Rojas de Boston, al igual que lo hacen para David "Big Papi" Ortiz en la actualidad. Hace apenas un par de décadas, tal vez fue aceptable ver a la gente blanquear sus etnias. Tome el actor Martin Sheen, también conocido como Ramón Antonio Gerardo Estévez, cuyas raíces fueron expuestas cuando uno de sus hijos, Emilio Estévez Jr., decidió usar el apellido verdadero de su padre, mientras que otro, Charlie Sheen, mantuvo el falso. Tome un joven actor cubano de Miami, que era conocido como Rocky Echevarría cuando protagonizó una serie de televisión pública llamada "Que Pasa, USA?" Luego aparentemente se convirtió en alemán cuando llegó a Hollywood. Así que ahora es conocido como Steven Bauer. Pero si usted cree que ha llegado el momento en que los latinos ya no sienten la necesidad de americanizar sus nombres para tener éxito en esta sociedad, se equivoca. Mars no es el único. Hay una nueva generación de cambia-nombres . El actor mexicano-estadounidense James David Rodríguez es ahora James Roday. La actriz puertorriqueña Charlotte López se convirtió en Charlotte Ayanna. El actor nacido en Guatemala Oscar Hernández es ahora Oscar Issac porque supuestamente quiere evitar ser encasillado en papeles de latinos.
Por desgracia, cuando las celebridades llegan a la cima ocultando su patrimonio, la sociedad no ve que hay latinos haciendo contribuciones positivas, y los jóvenes latinos se ven privados de modelos a seguir. No obstante, dado sus rechazos de sus propios orígenes étnicos, tenemos que preguntarnos: "™Qué clase de modelos iban a hacer?" Y si usted oculta su origen étnico, si considera que su patrimonio es más un estorbo que una ventaja, deben todavía apoyarlo las personas que comparten su herencia? En el pasado, incluso cuando los artistas sentían que tenían que cambiar sus nombres para tener éxito en el espectáculo, hubieron latinos que demostraron que no tenían que renunciar a sus patrimonios. Tome el caso de Dolores del Río, la actriz mexicana cuyo apellido real era Martínez. Ella se aferró a su herencia cuando eligió un nombre artístico hispano y se las arregló para conquistar Hollywood. O la actriz mexicana Carmen Zapata, quien trató de usar un par de nombres anglicados - Marian Saunders y Marge Cameron - sólo para volver a obtener el éxito, incluyendo una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, como Carmen Zapata. Sin embargo, en los viejos tiempos de Hollywood, muchos latinos frecuentemente tenían que elegir entre ocultar sus orígenes étnicos o perder empleo actuando. Para ellos, se trataba de una cuestión de supervivencia, y eso los hace difícil de juzgar o condenar. Pero también nos hace fácil admirar y alabar a aquellos que soportaron la tormenta y se aferraron a sus apellidos étnicos. Celebridades como Desi Arnaz, Ricardo Montalbán, José Ferrer, Cesar Romero, Rita Moreno, Miriam Colón, Raúl Julia y Fernando Lamas merecen nuestro reconocimiento y gratitud por siempre reconocer sus raíces hispanas. Se negaron a vender sus identidades étnicas y se convirtieron en los pioneros, abriendo las puertas para las celebridades latinas de hoy - Andy García, Edward James Olmos, George López, John Leguizamo, Jennifer López y muchos otros - que no tuvieron que cambiar sus apellidos hispanos u ocultar sus orgullosas identidades latinas para triunfar en Hollywood. Sin embargo, algunos jóvenes actores latinos tienen la impresión de que se convierten más atractivos en Hollywood si se tiñen sus nombres color rubio y pretenden ser algo que no son. Ellos están actuando muy mal, aún antes de que lleguen al escenario. Pero, ™qué hacemos los latinos con estos jóvenes artistas hispanos que esconden sus patrimonios? ™Los denunciamos como vendepatrias? Incluso cuando llegan a la cima del éxito, podemos sentirnos orgullosos de la forma en que lo han hecho? No deberían ser famosos. Deben ser infames. Para leer otros capítulos que han sido traducidos al español, COPYRIGHT 2014 CREATORS.COM |
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